jueves, 8 de noviembre de 2007

A Galileo Galilei

In memoriam

A todos los hombres que se adelantaron a su tiempo.


 


          Copernicano dios de las estrellas


deja que llore tu desgracia.


          De rodillas, abjurando de la Tierra


el movimiento y su fatiga.


          Cómo de tanta ceguera consolarte


cómo redimir tanta soberbia.


          Déjame acompañarte en tu infortunio


toma mis ojos


 


                         y engrendra de nuevo la luz.


 


          Copernicano dios de las estrellas


deja que llore tu desgracia.


          De rodillas, abjurando del Universo


su inmensidad, del Sol su majestad.


          Cómo acallar tanta ignorancia


cómo liberarte de las sombras.


          Deja que me una a tu calvario


toma mi rebeldía y grita con tu voz oceánica:


 


                         ¡y sin embargo, se mueve!


 


Harmonicus


fotografía: niguez.com


 


Galileo Galilei


 

6 comentarios:

terevidal dijo...

!Cuanta contención sospecho en este poema dedicado a un librepensador, fue molestado toda su vida por pretender y defender! argumentar,cuestionar y debatir con libertad . Y es curioso que cuatro siglos despúes , razonar sigue necesitando justificación en demasiadas ocasiones.
Terrible lo que le ocurrió a Giordano, pero desquiciante y alucinante lo que tuvo que aguantar el hombre que utilizá por vez primera el método científico y encima tiene que justificarse por ello.
!Animo a los Galileos actuales !, que , son unos cuantos. Besos. tere

juanahernandezconesa dijo...

¡Qué bello tu comentario...!
¡ánimo! dices, a los " Galileos" actuales.
Me uno a ti. ¡Ánimo! La posteridad es un excelente lugar.
Que no os atormenten los prejuicios de, ésta, vuestra época.
Besos: Juana

jguirao dijo...

¡Hola Juana! ... ya sabes que yo estuve en Padua, pase antes por Florencia para contemplar la tumba de Galileo, allí estudié geometría, astronomía y el arte de vivir.De eso hace ya muchos años......

Posteriormente regresé, no sin antes pasr por Pisa, las estrellas no eran las mismas, mejor, si lo eran-mis ojos las miraban de forma distinta. Contemplé su lenguaje nocturno, sus ecos que nos llegan a unos pocos por ondas invisibles, esas que algunos, solo algunos escuchamos. Ecos de ternura, sabiduria y sosiego.

Ahora en noviembre marcho a París, alli me reencontraré con René, Isabe,Jacques, Diderot y unos amigos más. Tomaremos un cafe en Les Invalides y hablaremos hasta que la noche caiga sobre el Sena de ese lugar que aveces está falto de libertad: el Mar Mediterraneo.

Besos, te quiere, siempre Jaume

juanahernandezconesa dijo...

Mi querido Jaume: es tan bonito lo que cuentas...

Sí, a veces, no sabemos mirar las estrellas. Galileo pasó su vida mirándolas y dio su vida por ellas.

Nuestras vidas ya tienen un sentido si tratamos de emular a los que nos legaron: el valor de su entrega, la pasión y la valentía que pusieron en sus empeños.
Admiro a los valientes. Y Galileo lo fue.

En París también disfrutarás de un otoño bellísimo y los amigos que mencionas son una excelente compañía. La luna caerá sobre el Sena como en ningún otro lugar sabe hacerlo...¡es único!

Gracias por compartir tus divertidas, sensibles e inteligentes apreciaciones con nosotros. Eres un lujo.
Besos: Juana.

rufigarcianadal dijo...

Me gusta creer en el aforismo: el tiempo pone a todo el mundo en su sitio.
Gracias, Juana; por regalarnos este bello poema, y por recordarnos que la historia siempre se repite.
Basta ya de mediocridad. Como ha escrito Tere
¡Ánimo a los Galileos Actuales! yo tambien me uno.

juanahernandezconesa dijo...

Pues desde esta página, parece evidente que, somos defensores de aquellos que la sociedad ha "maltratado" .
Galileo es tan sólo un paradigma ....¡Pero han y son tantos...!
A la gloria de todos ellos...