Ay, si tú estuvieras
un instante bastaría
para que el mar
llorara.
Las palabras de mis silencios
retozarían ensordecedoras
entre olas y vientos,
el letargo de mi triste voz
se volvería canto de pesñascos, y
mis versos de amor no morirían,
si tú estuvieras…
Ay, si tú estuvieras
un instante bastaría
para que las islas,
suspiraran.
En un bergantín
derrotado por los cielos,
solas, remotas y ocultas
dormitan nuestras palabras
ahogadas en las profundidades
de los naufragios, pero
si tú estuvieras…
Ay, si tú estivieras
un instante bastaría
para que las mareas se
amaran.
fotografía: niguez.com
5 comentarios:
Querida Juana:
Bienvenida a este mundo de internet. Estoy seguro que desde hoy se verá un poco más enriquecido con tu valiosísima aportación. Gracias
Andrés
Querido Andrés:
Siempre gracias a ti y a tus conocimientos, que han hecho posible que el Mediterráneo de mi humilde prosa bañe las costas del "Universo de Internet".
Besos: Juana.
Extraordinario poema, lleno de fuera y sensibilidad
Mi "Enhorabuena Virtual"
Quino
Las mujeres sois como "esa" mar que da la vida...
¡Seguid aguantándonos, porque sino el mundo no tendría "vida".......!
No hay nada que "aguantar". El Gran Hacedor, autor del Universo, no se despistó un ápice.
¡Esta travesía resulta mucho más interesante con vosotros: los hombres!
Si bien, es cierto que nosotras- las mujeres- le damos un toque misterioso a la cotidianidad del parte metereológico.
Gracias por visitarnos y participar.
Juana
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