Eras distinta.Asombro. Deleite.Sin atributios que conjugar.Distinta. Lo supe. No lo pensé. Lo supe con las manos de acariciarno desde la altura del pensamiento.Delante de mis ojos te escondíasen tus contrastes azules. Única, gesto a gesto, te reconocíentre los infinitos de la nada,entre los letargos oscuros de mi almaya apagada. Te reconocí. En un tiempo coincidido en las entregas de un instante,en un escorzo de luz. Habías llegado. Desde los designios casuales,desde los secretos fatigados por tanto silencio. Habías llegado. Un techo de agua se rasgóen la alegría de mi amor al percibirlo. ¡ Qué gozo haberte halladoentre las calles del mundo!
Pintura de Rufi García Nadal. Acrílico y técnica mixta, sobre tabla entelada 60x50 cm
Soy de una tierraque posee una solemne estirpe:tiene palabras de aceitey de vino,sílabas de plata y oroen sus entrañas,dioses y reyes antiguos,y un cielo que ha visto la muerte.Su mar vive en un pedestalde naves,que a lomos de gloriasconoció el vientoen el terrorde cada batalla.En mi tierra hubo hombresesclavossin rendirse al enemigo,y mujeres que parieron,desde los semillerosde la vid y del olivo.Madres de una tierradefendidacontra la invasióny la avaricia.Hijos del mar,de olas eternas,libres,que miraban los senosde las estrellaspara acallar el hambrede las derrotas.
Fotografía:niguez.com
Celebro tanto tu miradaque me falta tiempopara despojarme de tus ojos. Me falta tiempopara embriagarme con tu olora caracolas de azules oceánicosen una espera de lentitudes naciendo. Celebro tanto ese misterio de querernos que me falta tiempo para dibujarte en las lunas que pasean por el cielo.
Fotografía niguez.com